De Juana y la actualidad política

Esto de De Juana no lo tengo del todo claro, mejor dicho en algún aspecto lo tengo bastante nítido, la condena actual es una aberración promovida por el gobierno socialista, por mano de López Aguilar, para tratar de calmar a la jauría que se le echaba encima. Tremendo error que demuestra un escaso conocimiento del rival pues, por lo que se está viendo, hagan lo que hagan buscarán la forma de crear alarmismo. Por lo tanto todo parte de un grave error del PSOE en el poder, que está teniendo estas desagradables consecuencias.

Claro que ahora la solución del conflicto es mucho más difícil pues lo que en su momento era una decisión claramente judicial, por mucho que la gente del PP hubiera tratado de tergiversar el asunto, se ha convertido aparentemente en una cesión del gobierno al chantaje de la huelga de hambre de De Juana. Pero aquí el gobierno, a través de instituciones penitenciarias, sí que ha tenido intervención, con lo que de la nada han creado un problema importante, pues para mucha gente resulta difícil de creer lo del peligro de muerte, aunque pudiera ser cierto.

Si no lo hubieran hecho el asunto estaría ya amortizado y sin problemas, pero allí donde se había demostrado valor para unas cosas se demostró una cobardía y falta de sensatez tremendas que ha llevado a dar alas a los que rebuscan en el estiércol para embadurnar las ideas de los ciudadanos.

Dicho esto tengo que afirmar que en mi opinión, y a pesar de aborrecer al infame De Juana (también tiene delito que los que opinemos como yo tengamos que añadir esta coletilla en nuestras opiniones, aunque siempre hayamos estado en contra de ETA) éste tendría que haber estado en su casa desde hace muchos meses pues los atajos (¡malditos atajos!) son, o deberían ser, inaceptables para todos aquellos que confiamos en la democracia. Esto es algo que se ha demostrado repetidamente, en alguno de los casos por culpa también del PSOE, aunque, a pesar de aparatosas declaraciones, no son solo ellos quienes lo han hecho. Cualquier incumplimiento o búsqueda de grietas en la legalidad para forzarla con la idea de que fin justifica los medios, nos pone a la altura del delincuente.

Por lo tanto la premisa de la que parto es que cualquier suavización de una condena absolutamente injusta me parece aceptable, si es legal. Y era legal. El problema es que con esta actuación se está dando la impresión a mucha gente de que el gobierno está cediendo ante ETA y esto es inadmisible, creando una alarma entre la población que debería haber sido evitada.

Sin embargo y mientras no se me demuestre lo contrario siempre que se actúa, repito, según la legalidad cualquier cesión que pueda servir para erradicar el terrorismo será para mí bienvenida. No sé si esto servirá para ello o no, si es que no y realmente el terrorismo se ve reforzado, el gobierno habrá cometido un error importante, pero si no es así y, a la larga, se comprueba que el terrorismo decae o desaparece prefiero mil cesiones legales a un solo muerto más. La vida de un ser humano está por encima de orgullos y de posturas de dignidad. Prefiero que la dignidad de las víctimas se vea golpeada a que haya una víctima más para engrosar las filas de sus asociaciones. Escojo barcos sin honra antes que honra sin barcos, si se trata de vidas humanas.

No creo que, tras lo dicho, sorprenda que, si lo que me dicen desde el gobierno es cierto, apoye casi sin matices (el casi lo pongo por la alarma creada) su postura. Puede que el gobierno me mienta, pero también puede que no. Ahora bien, si dudo del gobierno también tendré que dudar de una oposición que, desde que perdió las elecciones, está poniendo todo de su parte para crear problemas, con una postura de negación a todo incluyendo temas tan delicados como el terrorismo, con el fin de que la crispación consiga que la parte del electorado que salió de su letargo para que el PP no gobernara tras su equivocada actuación tras el 11M, vuelva a sus casas desmovilizada.

Aquellos que reiteradamente nos han estado contando los desastres que el gobierno ha estado perpetrando y los incumplimientos constitucionales (a pesar de la reiteración del ejecutivo en confirmar lo que públicamente prometió en el Congreso), asegurando cesiones a ETA sin ninguna base probatoria (no opiniones) sin otro dato que sus intuiciones, me merecen la misma credibilidad, poniéndonos generosos, que el gobierno.

Considero que el gobierno actual, como todos los anteriores elegidos democráticamente, tienen el derecho y el deber de tantear y buscar soluciones para que este enorme problema creado hace demasiados años y nunca resuelto por la vía policial, se resuelva definitivamente. Puede que lo consiga o puede que no, pero si lo intenta dentro de la legalidad, incluso hablando con quien tenga que hablar (nunca entenderé la criminalización del diálogo y menos por parte de quienes sí han hablado) sin romper, como se ha dicho reiteradamente, el ordenamiento legal del Estado, tendrán mi apoyo.

Las consecuencias de esta suavización legal (repito una vez más, legal) del criminal que celebraba los atentados desde la cárcel no las conozco, pero algunos parecen conocerlas perfectamente, sin tener en cuenta la situación que atraviesa en estos momentos la sociedad vasca, y concretamente la llamada izquierda abertzale, a los que como mínimo habrá que conceder un cambio de estrategia (no sé si de postura, está por verse) que podría ser un punto de apoyo para nuevas exploraciones.

El blanco o negro, por mucho que algunos lo consideren ahora como algo inamovible, no funciona ni resuelve nada si existe una base social que, equivocada o no, sigue a los que considera unos luchadores por la libertad. A mí personalmente me parece ridículo, si no fuera tan trágico, pero este lavado de cerebro no es tan distinto al que sufren muchos otros desde posturas diferentes o antagónicas y es preciso contar con ello.

No tengo demasiada confianza en quienes, como la llamada izquierda abertzale, han demostrado durante años que no la merecen, pero obviar las circunstancias de cada momento me parece un error que puede resultar trágico y las circunstancias actuales tras el atentado del 11M y el de Barajas (por mucho que lo rechacemos, un accidente, culpable pero accidente, ya que los estúpidos criminales que pusieron las bombas no tenían intención de matar… como si poner bombas en un lugar como ese fuera utilizar fuegos artificiales) han hecho que haya gente que se replantee ciertas cosas.

Por otro lado soy de la opinión (opinión, no seguridad) de que, a pesar de declaraciones altisonantes y posiciones de teórica fuerza, ETA ha perdido ya, y lo sabe. Su discurso de ahora nada tiene que ver con la alternativa KAS inicial. Andan buscando una justificación a sabiendas de que lo que pretendían no es posible. Esto no significa que no puedan matar, eso resulta bastante fácil y cualquier loco con una pistola puede montar una escisión que continúe con su “negocio” pero creo que es cuestión de tiempo el que cedan definitivamente y, si es dentro de la legalidad, cualquier cosa que sirva para ello y evite otra muerte debe ser tenida en consideración.

Es posible que me equivoque, y si es así rectificaré gustosamente. Me equivoqué cuando pensé que ETA no iba a matar a nadie mientras se buscaba una solución pues pensaba que tendrían un poco más de inteligencia, pero sigo pensando que lo que intenta el gobierno es algo que merece la pena intentar, y que no se merece el acoso y derribo a que le ha sometido sin respiro alguno la oposición política y mediática, que se ha portado de una forma bastante indigna y enormemente hipócrita en multitud de ocasiones y más teniendo en cuenta la necesidad de una discreción y un apoyo, al menos como el que recibieron cuando gobernaban, para tratar de solucionar un grave problema, aunque no les ayudara a ganar la próximas elecciones.

Claro que eso no quita para que piense que deben desaparecer opiniones que a nada conducen y que no crean sino incomodidad y rechazo entre mucha gente razonable, como las realizadas por el Sr. Blanco tras la manifestación del 10 de Marzo. Su comparación con los muertos de Irak no venía a cuento y lo que hace es darle más posibilidades al Partido Popular para "demostrar" la radicalidad y la falta de seriedad de un partido, el PSOE, cuyo Secretario de Organización realiza este tipo de declaraciones.

El problema reside en que no es la primera vez, y estas cosas a la larga hacen que, aunque los que están convencidos de las falacias del PP puedan seguir votando al PSOE, los que están en una posición más dudosa, por la propaganda o por la razón que sea, se alejen de la política y vuelvan a la posición abstencionista de la que salieron para evitar que los que les mentían descaradamente volvieran a salir elegidos. Esa postura de atacar con exageraciones hace más daño al PSOE que al PP. Deberían ser conscientes de que no hay que dar opciones al adversario a sabiendas de que, con sus posibilidades mediáticas, van a hacer sangre con esos errores.

Es preciso mantenerse en calma, respondiendo, sin duda, pero desde la serenidad, nunca desde la hipérbole. Es necesario que aprendan a vender bien las cosas buenas realizadas, pero también a evitar esas peleas callejeras de navajeros, donde no hay nada que hacer. Siempre estarán por encima, están más habituados. Como he comentado mucha gente no entiende la suavización de la pena de De Juana, y una buena parte de esa gente se quedará en casa las próximas elecciones, pero no es entrando en el cuerpo a cuerpo, que harta mucho a los electores menos fanatizados, como se recuperarán, sino tratando de ser coherentes.